¿Y nuestra sanidad qué?

En algunas ocasiones nos sentimos engañados y maltratados por aquellos entes públicos que, financiados con nuestro esfuerzo e impuestos, tienen la obligación de darnos un buen servicio. La reacción generalizada es callarnos o, por el contrario, arremeter con una soberbia bronca al empleado de turno, que poco puede hacer para mejorar la situación.

Últimamente estamos recibiendo numerosas quejas sobre los servicios que ofrece el Centre d’Atenció Primària de Abrera (CAP). Sabemos que no es culpa de los profesionales del mismo, que bastante hacen con el personal y medios que disponen, sobre todo cuando desde la Concejalía de Sanidad se defiende el servicio actual, escudándose en que siempre se ha hecho así. 

Lamentablemente, se repite con demasiada frecuencia visitar el CAP para acabar por remitirnos al servicio más próximo de urgencias (Martorell o Esparraguera), porque en Abrera no nos pueden visitar a según que horas o días. 

Es totalmente incomprensible que con los aproximadamente 11.500 habitantes que vivimos en Abrera, aún estemos sin servicio de urgencias las 24 h. y que tampoco dispongamos de farmacia de guardia como otros pueblos vecinos. 

Con esta gestión, se puede entender perfectamente porqué en el programa electoral del PSC de Abrera se prometía a bombo y platillo la construcción de un Hospital en Martorell, supuestamente para seguir potenciando el éxodo sanitario de los ciudadanos en caso de urgencia médica. 

De todas maneras, reconozcamos que parte de la culpa corresponde a nosotros mismos, los usuarios. Muy pocos de nosotros utilizamos las hojas de reclamaciones, quizá pensando que no sirven para nada. Pues bien, desde esta página animamos a todo el que tenga problemas a utilizar los medios a su alcance para reclamar sus derechos. Al contrario de lo que pensamos, sí que sirven, por lo menos para que las altas esferas sepan que no todo funciona como creen. Además, cuantas más reclamaciones, mas caso nos harán. 

Independientemente de las denuncias y aunque sea por la cantidad de quejas que venimos escuchando, hacemos, una vez más, un llamamiento a nuestro Ayuntamiento para que defienda y gestione los servicios que los y las abrerenses necesitamos y no tenemos cubiertos, razón por la cual nos vemos obligados a desplazarnos o a pagar doblemente de nuestros bolsillos. 

Sra. Alcaldesa, los y las abrerenses no somos ni queremos ser ciudadanos de tercera; merecemos algo mejor. 

Una vez más, criticable la gestión de los gobiernos.

Krise, welche Krise? (¿crisis, qué crisis?)

Hace escasos días nuestro municipio recibió la visita del Sr. Álvarez, importante dirigente del sindicato UGT el cual, sin ningún tipo de pudor, asiste a los diferentes actos que el partido del gobierno le prepara afectuosamente por ser su sindicato afín, aun en los malos tiempos que corren para el colectivo de trabajadores que representa.

En una de las jornadas que el PSC le organiza, esta vez dispuesta por nuestra alcaldesa y el secretario general del PSC de Abrera, se concluye de las palabras del mencionado dirigente sindicalista la aprobación por parte de su organización para que los trabajadores de Seat acepten una congelación del salario, como así se ha recogido posteriormente en los medios de comunicación. Debido a que un importantísimo número de estos trabajadores y trabajadoras son ciudadanos de Abrera, además de aquéllos de empresas ligadas al sector, creemos oportuno informar de lo siguiente:

La congelación de dos años de sueldo significa perder el equivalente aproximado a la letra “D” que consiguieron hace algunos años y el poder adquisitivo de por vida. El valor de la actualización de estos importes (por lo menos el IPC real de este año), no representa mas de 5 millones de euros, cifra irrisoria comparada con los bonus que cobran los directivos de la misma empresa.

En total, el importe de los salarios no representa mas allá del 7% del valor final del vehículo, con lo que no se entiende la petición de Audi-Volskwagen si no es para conseguir más dinero, más beneficio, que es lo único que importa para la construcción del Q-3, en un momento en que el president Montilla no para de llamar a la restricción de beneficios y a la congelación salarial, mientras se desvían contingentes partidas de dinero para sanear las cuentas de bancos y grandes multinacionales con el dinero de todos.

En la última y reciente visita que el president Montilla realizó a Seat no reparó en exigir esfuerzos a la plantilla en la línea de la congelación salarial. Habría que preguntarle si él también va a hacer el mismo esfuerzo y se va a rebajar el salario en esta época de vacas flacas, pues en la actualidad cobra alrededor de 159 mil € anuales, frente los cerca de los 89 mil € anuales del presidente del Gobierno, además de la pensión vitalicia a la que optará por pleno derecho cuando deje el cargo. Francamente, con ese sueldo y condiciones, ¿qué crisis existe? ¿Qué repercusiones pueden suponerle la congelación de su salario? ¿Con qué desfachatez pide la contención salarial a los demás?

Igualmente, cualquier negociación actual no garantiza el mantenimiento del empleo en un futuro, ya que si se sigue la actual tendencia se seguirá sin vender coches, situación que aboca a la petición del enésimo ERE, que conllevará al final a los 1.500 despidos.

Lo que obvian los políticos socialistas y sus afines sindicalistas ugetistas es que están entrando en el juego de subasta que marca la multinacional. Históricamente, la central alemana asignaba la construcción de un modelo a una de las filiales, supuestamente tras un estudio económico-financiero y estratégico. El hábil juego actual es lanzar el proyecto para que sean las filiales quienes, a través de vueltas de tuerca a sus trabajadores y subvenciones de los gobiernos locales, lancen las mejores ofertas para adquirir el producto. Así, la central alemana sólo tiene que optar por el mejor postor que le proporcione los mayores beneficios. Realmente una estrategia perfecta.

A raíz de esta coyuntura se nos ocurren unas cuantas preguntas:

- ¿Cuántos millones supondrá este año el Departamento de Presidencia de Seat?

- Sr. Gallardo, secretario general del PSC Abrera, por sus palabras en la conferencia creímos entender que ya empezaban las obras de un nuevo taller para el Q-3 ¿Le entendimos bien, teniendo en cuenta que estas palabras son anteriores a la propuesta de UGT sobre la congelación salarial para los trabajadores? ¿Si Usted tiene información de construcción de talleres para el Q-3, significa que ya está pactada la concesión, por tanto, a qué viene la propuesta de congelación salarial hecha por su sindicato (en SEAT) y por su partido (en el gobierno) a posteriori?

- Señora alcaldesa de Abrera, puesto que gran parte de los y las abrerenses trabajan en el sector y van a ser producto de la sagaz estrategia de la multinacional, con la complacencia de su partido, ¿nos congelaran los impuestos en consecuencia para paliar la pérdida de poder adquisitivo?

Este es el sindicato que nos defiende y algunos de cuyos representantes gobiernan nuestro pueblo.